La industria de los videojuegos ha ido incrementando paulatinamente su presencia en nuestra sociedad. En la actualidad, los videojuegos se presentan disponibles en multiplataforma, lo que amplia exponencialmente el público objetivo que puede uso de los mismos (videoconsolas, PC y aplicaciones móviles -Apps-).

Tanto es así que, de acuerdo con los datos del último informe global del mercado de los videojuegos presentado por Newzoo, el mercado mundial de videojuegos habría obtenido una facturación de 134.900 millones de dólares (119.606 millones de euros) en 2018 a 152.100 millones de dólares (133.670 millones de euros) en 2019 (fuente: http://www.aevi.org.es/ – Asociación Española de Videojuegos).

La realidad de la protección de los videojuegos es que nos encontramos ante obras creativas altamente complejas que implican la concurrencia de programas informáticos y diversos elementos multimedia:

  • Audio: música, voces, efectos de sonido…
  • Vídeo: imágenes, animación, texto…
  • Software: códigos, plug ins, códigos de interoperabilidad con el sistema…
  • Contenido audiovisual: historia original, guion, grabación de voces y doblajes, producción artística, etc.

Como puede imaginarse, la concurrencia de todos esos elementos genera razonables tensiones entre las esferas de protección de todas ellas, así como tampoco hace posible calificarlos de manera unívoca dada su heterogénea composición de derechos concurrentes susceptibles de protección.

Artem Iuris ® ofrece a sus clientes un asesoramiento especializado al sector de la industria de los videojuegos, considerando las especiales características concurrentes en estas creaciones. Sobre este particular, nos encargamos de la redacción de los contratos para la explotación del producto final y de los acuerdos de licencia de los usuarios finales.